Pero también voy a realizar una crónica de este recorrido (a modo extenso descriptivo) en el blog… comienza por aquí:
El día de hoy, podría decirse que fue movido, un total diario de casi 35km, para ser exacto 34,91km (que incluyen la caminata de la mañana redactada en otra entrada del blog) de los cuales 27,8 km corresponde al pedaleo en bicicleta, un circuito completado en una hora con cuarenta minutos. Un domingo hermoso, soleado, con 28ºC, aprovechado para el ejercitación aficionada, a ritmo sin exigencias.
Desde la última actualización, la app Samsung Health ya no divide en pasos y pedaleo, en caminar y bicicletear, sino que por algún sistema (algún algoritmo) convierte en pasos lo pedaleado. Así que siguiendo a la app, la conversión total del ejercicio realizado estaría dando unos 13400 pasos completando un total de 10,67km “caminados”.
Un par de capturas más con datos, que solo los subo porque los hice, sin nada que comentar paso a la crónica del recorrido.
Comencé el recorrido en Plaza Italia. A las 14:50hs de la tarde, ya estaba en el Monumento de los Españoles (Monumento a La Carta Magna y las Cuatro Regiones Argentinas).
Monumento de los Españoles.
Av. del Libertador.
Av. del Libertador.
Monumento a La Carta Magna y las Cuatro Regiones Argentinas.
Monumento de los Españoles.
Monumento de los Españoles.
Entré al Parque 3 de Febrero, y en el circuito que rodea El Rosedal, di la primera vuelta de lo que podría llamar el primero de “los tres círculos” (aunque el último es un óvalo y este sería un círculo irregular).
Entrando por los estacionamiento.
Entrando al circuito que rodea al Rosedal.
La sombra.
Los gansos domésticos (Anser anser). Ocas de Ampurdán.
La elongación.
El puente y los visitantes.
El trote.
Los botes.
El verde.
El descanso.
Finalizada la primera vuelta, tomé el mismo camino por el que llegué, ahora rumbo al Parque Centenario.
La salida.
Monumento a La Carta Magna y las Cuatro Regiones Argentinas.
Av. del Libertador.
Av. del Libertador.
Al iniciar le regreso por ciclovía de Av. Sarmiento, tomé captura de la app a lo ya hecho.
Una incomodidad fue evitar una peatón bastante desconsiderada con los ciclistas obstruyendo la ciclovía, pero además llevando un cochecito con bebé, era un grupo de cinco, y quien obstruía debería ser la quien más diligencia debería tener por llevar una criatura, y teniendo espacio disponible en la vereda, decide por capricho provocativo ir circulando por la ciclovía, ¿o puede que se trate de una persona que no sabe que por ese camino circulan bicicletas? ¿podrá ser que piense que se trata de un camino para cochecitos? No me lo creo. Se pueden producir muchos hechos “accidentales” (aunque si son prevenibles no son accidentes), un ciclista se puede llevar puesta a la transeúnte, un ciclista puede caer por evitarla (por cientos de razones, pérdida de equilibrio, irregularidades en la ciclovía, etc...), un ciclista puede chocar con otro de frente (ya sea porque no lo ve, baja visión, puede ser un niño en rodado pequeño, o puede ser una plegable), etc… pero aunque no pase absolutamente nada (como en este caso) ¿por qué no respetar cada uno el lugar que le corresponde? El peatón por la vereda y el ciclista por la ciclovía.
Peatón ocupa la ciclovía con un cochecito.
Antes de cruzar a Plaza Italia le tomé foto al Monumento a Giuseppe Garibaldi. Y desde la misma plaza le tomé foto a la Av. Santa Fe y a la esquina del Jardín Botánico donde destaca uno de entre los árboles más altos que hay allí, una araucaria (posiblemente la especie sea Araucaria bidwillii) que supo ser hogar de una familia de gavilanes mixtos (Parabuteo unicinctus).
Monumento a Giuseppe Garibaldi en Plaza Italia.
Araucaria en Jardín Botánico.
Tomé la ciclovía de calle Borges/Serrano, rodee Plaza Cortázar, que siendo las 15:08hs ya estaba con bastante visitantes, crucé Av. Corrientes, giré por ciclovía de calle Padilla/Bravard y ya me estaba acercando al Parque Centenario.
Ciclovía de calle Borges.
Llegando a Plaza Cortázar.
Av. Corrientes.
Av. Corrientes.
Ciclovia calle Bravard.
Llegué al Parque Centenario y comencé a rodearlo por ciclovía al de los puestos-toldos de la feria. Desde allí ví el Hospital Naval, un Monumento a los Héroes del Crucero General Belgrano, la feria de manteros y una escultura Caballito. No había mucha gente en ese horario.
Museo de Ciencias Naturales.
Ciclovía en Parque Centenario.
Hospital Naval.
Ciclovía en Parque Centenario.
Monumento a los Héroes del Crucero General Belgrano.
Feria de manteros.
Ciclovía en Parque Centenario.
Hasta que llegué al Mástil del Parque Centenario. Justo antes de empezar el sector del empedrado, allí paré para un par de minutos hidratarme. Y tomar capturas de la app.
Mástil del Parque Centenario.
Mástil del Parque Centenario.
Mástil del Parque Centenario.
Estando allí le tomé foto a un papel con un dibujo que estaba tirado en lo que sería la cuneta.
Dibujito.
Continué por el empedrado, todavía se podía pasar, había gente pero no tanta como se suele llenar más tarde. Hay veces que están “los de tránsito” y no permiten circular con bicicletas en ese sector, pero suelen aparecer en el horario pico. Allí hice un parate y capturé pantalla de la app. Iba cerrando el círculo.
Empedrado.
Empedrado.
Finalmente completé el círculo del Parque Centenario. A partir de aquí el objetivo sería llegar al Parque Saavedra.
Volviendo sobre mis pasos, o mejor dicho, sobre el camino rodado. Le tomé una foto a un cartel sobre la ciclovía de la calle Serrano que anuncia la distancia hasta Plaza Italia, 2, 2 km (16 cuadras más adelante) en 10 minutos. Llegue a la ciclovía de la calle Gorriti. Allí hice un nuevo parate para hidratarme, giré a la izquierda y desde ahí hasta el objetivo final de alcanzar el tercer parque, pedalee sin parar.
Cartel.
Camión.
Ciclovía calle Gorriti.
En el trayecto de ida, salvo dos fotos, no tomé ninguna más, esta vez lo hice directo sin parar, alrededor de 54 cuadras. Una de las fotos la tomé cruzando la empedrada Av. de los Incas, allí es donde se produce el último giro de la ciclovía que luego lleva en línea recta al Parque Saavedra. Tomé la foto porque había una combi estacionada y me pareció llamativa, con techo tipo camper, rueda de repuesto adelante y una especie de ojo de buey lateral trasero. Quien sabe si es un modelo de la década del ´80 tuneado u original de la Volkswagen T2 Transporter o si es un modelo de la reedición especial del 2011, desconozco de vehículos pero cerca de ellos debe andar.
Combi Volkswagen T2 Transporter.
Combi Volkswagen T2 Transporter.
A las 16:10hs de las tarde llegué al Parque Saavedra. Uno de los parques más antiguos de la ciudad, antes cruzaba un arroyo por medio del parque, un arroyo que ahora fue intubado. El parque tiene forma de óvalo, y una ciclovía recorre su contorno. Darle la vuelta al parque lleva 5 minutos, uno o dos minutos más con las detenciones para tomar fotos y mirar el lugar. Completada la vuelta, antes de emprender el regreso, un poco de hidratación.
Parque Saavedra.
Parque Saavedra.
Parque Saavedra.
Parque Saavedra.
Parque Saavedra.
Parque Saavedra.
Al regreso, en el cruce de calle Superí con calle Jaramillo, le tomé foto a un mural. Este mural es bastante nuevo, data de septiembre de 2020, y se denomina Espejos. Realizado por el artista Sebastian Caneda, director de Jardinesasi(1)(2), mural que le regalaron al barrio Saavedra. La realización del mismo incluye técnicas de mosaiquismo, vitrofusión y espejos, como así consigna la guía Turismo en Barrios, Pedaleando Buenos Aires 2. (3)
Mural Espejos.
Mural Espejos.
En una esquina del cruce de calle Superí y calle Quesada, encontré otro mural al que le tomé foto. El muraldata de marzo de 2020, según muestra Google Maps. Este mural se me presenta brindándome mucha información pero al mismo tiempo no me deja nada en claro. En esa misma esquina del barrio Cohlan, supo haber antes, por tres o cuatro años, un mural distinto. El muralestá firmado por “Mural del Colegio de la Ciudad” (4) y su página web. Una nota del diario Perfil tilda a estos jóvenes como “un grupo de grafiteros legales” (5). Mi primera inquietud es si el mural fue vandalizado o si fue realizado así como se ve en la fotografía. Mi impresión sería que fue vandalizado y sobre el mural escribieron “wisin river” y "wisin yandel”, al mismo tiempo pienso que podría ser un mural publicitario, que ambos reggatoneros son conocidos por los jóvenes, y los que pintaron el mural son adolescentes, river puede aludir al club como también puede traducirse como río, y los ríos tiene agua, y el mural parece representar un especia acuático fantástico (con la figura del saurópsido), hay algas, hay un pez (que está pintado en la otra pared que no se ve), al tiempo que si visitamos otros murales (6) de este grupo del Colegio de la Ciudad, vemos que existe una tendencia a pintar naturaleza acuática, utilizan mucho los colores celestes, azules, blancas, transparencias, barcos, trabajan bien las algas, las células y los animales acuáticos como tortugas y peces, aquí jugaron un poco con este camaleón, pero también lo pienso que podría tratarse de una publicidad que desconozco y exista una relación con el camaleón y el agua. Tal vez sea todo divague de mi parte y nada de eso exprese el mural. Si el mural fue vandalizado, una pena, sino lo fue, bien, lograron transmitir su mensaje.
Mural.
Ya estando en el barrio de Colegiales, en la esquina de calle Superí con calle Virrey Olaguer y Feliú, un llamativo mural retuvo me atención. El mural pictorico fue pintado en diciembre de 2015 (7) por la artista Aldana Ferreyra(8). En un medio del barrio de Colegiales, una nota (9) refiere al lugar como “la esquina de las bicis” donde desde hace 50 años funciona una bicicletería. Hoy el mural está bastante descolorido, pasaron seis años desde que se pintó. Y, si bien, los colores perdieron su encanto, la abundancia de amarillo se mantiene y provoca que lo miremos. Parte de la pintura en la persiana fue vandalizada. Salvando el tema de los colores por el natural desgaste, me gustó parcialmente, pero si lo miro en su conjunto, más bien, me disgustó. Hay una ausencia de mujeres en la composición. En las bicis para hacer pruebas (bmx o cross, las pequeñas) las figuras pintadas son jóvenes haciendo piruetas. Las bicis rápidas (carrera o media carrera) están conducidas por dos sujetos con un cuerpo de deportista, o al menos, con medidas que asemejan a ciertos estándares de físico moderado (que visualmente puede traducirse como saludable). El problema que yo encuentro y que me disgusta es con las otras dos figuras. Pareciera que se busca alcanzar cierto humor (desconozco si esto refiere a algo más). Y el problema es el tipo de humor. Son dos personas adultas, solo vestidas con short, sin remeras y sin calzado, conduciendo un triciclo, con cierto sobrepeso, esa contextura desproporcionada se aleja del cuerpo “escultural” (o físico deportista) con panza, brazos y piernas gordas, ambos están gritando, y parecen tener gafas/anteojos grandes o algo que les tapa los ojos. ¿Qué se busca provocar con eso? ¿causar risa? Pues yo lo veo para el lado malo, me parece un intento de estupidizar/ridiculizar a persona adultas, representándolas enojadas (gritos), atontadas/inmaduras (conduciendo un triciclo y sin ropa), pareciera rozar la gordofobia (ambas figuras con sobrepeso) (10), como queriendo mostrar que un gordo no puede ser un ciclista, que un gordo en bicicleta es motivo de risa (aquí ni siquiera están en una bicicleta sino en un triciclo), el triciclo además de infantil representa la falta de equilibrio, y es sabido que para conducir una bicicleta es necesario el equilibro . A mí me parece que ahí la han pifiado, no es el mejor mensaje, me pregunto si las bicicleterías ¿les venden o no le venden a personas gordas?. Hay ciclistas gordos y obesos, conducen muy bien todo tipo de bicicletas y no necesitan rueditas, ese mural no pareciera ser inclusivo sino claramente estigmatizante. Hay muchos ciclistas con problemas de salud (donde se incluye el sobrepeso y la obesidad) que optan por la bicicleta para su bienestar. Hay otros que solo van a la bicicleta por placer, y en muchos casos superan ampliamente a ciclistas que “supuestamente” tienen mejor estado físico. Y en el último de los casos hipotéticos, dos ciclistas gordos, uno que no hace ciclismo y otro que sí hace ciclismo, siempre va a estar en mejor situación frente a una complicación quien practica ciclismo. (11)
Mural.
Mural.
Continué pedaleando hasta cerrar el recorrido. Llegue al punto de inicio y finalicé la app para guardar el archivo gpx y así conservar el recorrido.
Filmé parte del recorrido, comenzando a registrar desde calle Gorriti y calle Borges. Unos 25 minutos hasta llegar al Parque Saavedra.
En el minuto 10:20, sin darme cuenta, sigo a los ciclistas que van por delante, y de repente me encuentro que ya no hay ciclovía, se acabó. Error mío, por no prestar la suficiente atención. La ciclovía gira en calle Virrey Loreto una cuadra para retomar por calle Superí. En ese punto no es una “falta”, uno puede optar por continuar hacia adelante por ciclovia (girando y retomando por la otra cuadra) o por directamente por calle (continuando derecho). Mi error fue pasarme (por seguir a los de adelante) ya que mi objetivo era continuar por ciclovía (más lento, pero tal vez más seguro).
Aquí se me acabó la ciclovía y continué sin darme cuenta.
En el minuto 17:50, se ve como hay que esquivar un runner que decide practicar por la ciclovía, espacio para uso de ciclistas.
Esquivando un runner por ciclovía.
En el minuto 22:09 tuve que esquivar a una pareja de ciclistas, que decidieron detenerse sobre la misma ciclovía para hacer lo que sea que hayan tenido que hacer, y cuando paso, me pareció escuchar que uno de le dice al otro guarda la bici.
Esquivando dos detenidos en la ciclovía.
En el minuto 22:26 una pareja ocupa los dos carriles y además pasean al perro por la ciclovía.
Ocupando dos carriles y paseando al perro por ciclovía.