Caminando por la Av. Scalabrini Ortiz, a la altura del 1300, en el barrio de Palermo, casi llegando a la Av. Córdoba, límite con Villa Crespo, uno podía encontrarse con una casa, la cual poseía una ventana desde la que salía un frondoso árbol.
Lo curioso era que justamente el árbol nacía desde el interior de la vivienda y había encontrado su camino hacia la altura buscando la luz a través de la ventana.
La casa era antigua, tenía una fachada toda blanca con puertas viejas y altas, dos faroles y ventanas altas con rejas tipo balcón, rejas hasta la mitad. Estaba ubicada justo frente a una antigua iglesia y una comisaria.
La ventana por la que salía el árbol, era la más alta, si tomamos en cuenta la altura de la pared más la reja, hablamos de alrededor de 2 metros de altura, y por allí se escabullía el árbol.
Justo esa misma ventana poseía una segunda reja interior que cubría todo el espacio, y aun así el árbol pasó, comiéndose la reja, es decir, algunos barrotes quedaron dentro de los troncos del árbol como puede verse en la fotografía que le tomé.
Ya anteriormente había visto algo igual, pero en menor medida, un hierro de canasto de basura que había sido atado a un árbol, a través de los años y el crecimiento del árbol había sido tragado por el tronco, dejando al descubierto una carita de adorno que formaba parte del hierro del canasto.
¿Cómo hizo ese árbol para crecer tanto? ¿fue plantado adrede o quedó olvidado? ¿o llegó de casualidad? Nadie lo sabe ni lo sabrá, lo que si es seguro que tuvo un buen tiempo viviendo allí, para crecer de tal magnitud, solo pensar que la fotografía muestran una parcialidad del mismo.
Para el año 2010 la casa fue derribada y el árbol fue aserrado, actualmente al año 2014 han levantado un edificio de ocho plantas tal como muestra Steet View en Google Maps.
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