miércoles, 5 de agosto de 2015

La Vida en el Gran Río. El Paraná en Kayak.

(06 de Noviembre, 2014) Hace un par de años atrás, mi hermano, un aficionado a la navegación, me comentó que deseaba adquirir un libro llamado La Vida en el Gran Río - El Paraná en Kayak y cuyo autor era Víctor Ostrowski.
Bien, desde aquél momento estuve buscándolo. Resulta que se volvía difícil encontrarlo, se encuentra agotado desde hace unos cuantos años. Finalmente encontré un ejemplar y lo adquirí para regalárselo.
Al ojearlo me pareció interesante, luego de leer la contratapa, y se me dio leerlo completo, antes de entregárselo.

A modo de reseña biográfica voy a transcribir íntegramente lo que dice (que por cierto es lo mismo que figura en algunas web, aunque sin mencionar que es lo que dice la contratapa de este libro)
Víctor Ostrowski  (Dniepropetrovsk, Ucrania, 16 de junio de 1905 - Varsovia, Polonia, 19 de enero de 1992).
Polaco, egresado de la Politécnica de Varsovia como ingeniero, Víctor Ostrowski ha pasado su vida estrechamente ligado a la naturaleza.
Montañista, escaló las cumbres más altas de cuatro continentes: el Kilimanjaro en África (5895 m.); los Alpes en Europa; las cimas del Cáucaso intermedio, las montañas de Irán y Kurdistán en Asia, y en los Andes americanos, el Mercedario (6793 m.).
Remero, recorrió más de 6000 km. de ríos en su tierra natal. Es también cazador, pescador, fotógrafo, e integró la primera expedición argentina a los hielos patagónicos, en calidad de jefe del grupo de escaladores y esquiadores.
Paraná, término guaraní que significa “el pariente del mar”, por nadie ha sido mejor definido que por los indígenas, quienes durante incontables generaciones lo navegaron. Un coloso. Tan inmenso, tan nuestro, y sin embargo tan desconocido por nosotros.
Víctor Ostrowski lo recorrió en un kayak. Inició su viaje en las Cataratas del Iguazú, hendió las aguas del río homónimo y abordó el Paraná allá, donde se juntan las fronteras de Paraguay, Brasil y Argentina.
A lo largo de las páginas del libro van surgiendo los perfiles de los habitantes de esa tierra, de esas aguas, con su humanidad, sus flaquezas, su pintoresquismo y, también, con su tragedia y misterios a cuestas.
La vida en el Gran río, aporta, con su vívido relato, algo más para una mejor compresión de nuestra América.

La edición que conseguí es del año 1975 de la Editorial Cuarto Mundo. Y formó parte de la Colección de dicha Editorial llamada Hombres y Vidas (Relatos de la vida real. Viajes, dramas, aventuras, episodios insólitos). Se trata de la primer versión en castellano. Título original en polaco: Zycie Wielkiej Rzeki. Czytelnik. 1967. Traducido por Stan Odolsky. Son 250 páginas.

Ostrowski escribió tres libros: Safari En El Continente Negro (1953); Más alto que los cóndores (1954) y La vida en el gran Río (1967).

En esta web http://culturademontania.com.ar/Historia/biografia-victor_ostrowski.htm encontramos una biografía más extensa de Ostrowski, unas cuantas fotografías, y específicamente sus aventuras como montañero, andinista y alpinista, hay que tener en cuenta que es una web orientada al montañismo, justamente dicha web se llama Centro Cultural Argentino de Montaña.

El libro contiene unas cuantas fotografías que el mismo autor realizó. En blanco y negro. También hace mención a unas cuantas fotografías más pero que no figuran, en algún lugar posiblemente existan como registro de su travesía.
Realizó el viaje en el año 1966, para entonces tenía alrededor de 61 años. En ciertos momentos lo hace notar, aunque siempre se muestra jovial, hace mención a la necesidad de un compañero de navegación, y hace alusión a sus hazañas de su pasado más joven.
El kayak era (o había sido) su pasión. En su juventud había realizado travesías en kayak por todos los ríos importantes de Polonia (p. 10)

Comienza con una detallada comparación entre el Delta y Venecia, según afirma, alguien había llamado al Delta “la Venecia argentina”, algo que se encarga de desmitificar y poner cada cosa en su lugar marcando bien las diferencias.

Afirma, Toda aquella zona del Iguazú y alto Paraná está marcada en el mapa con el nombre de “selva”. (pág. 9). Creería que hace alusión a lo que comúnmente se conoce, al menos del lado argentino, lo que fue la “selva misionera”. Tengo comentarios actuales (hacia el 2014), de alguien nativo de allí y que por su trabajo recorrió la provincia, que, salvo el Parque Nacional Iguazú, el resto de lo que se conocía como “selva” prácticamente desapareció debido a la deforestación, no lo puedo afirmar, pero es la referencia que tengo.

La idea de realizar la travesía en kayak, surgió de una apuesta, apuesta que finalmente ganó, y en su relato nos cuenta las veces que le indicaron los peligros de continuar adelante con su proyecto y las dificultades a las que se enfrentaría, incluyendo los numerosos ofrecimientos de ayuda para trasladarlo en otras embarcaciones.
Da toda una definición de sí mismo y de su compañero/s de viaje cuando exclama ¡Tendría que ser otro loco! (pág. 11) generando una humorada.

Durante todo el libro describe a todos los personajes con los que se cruza, con los que se relaciona y con lo que no, todos ellos son sus amigos, se reconforta cuando lo tratan bien, parece que todo el tiempo busca una amistad, hasta el “gringo” como lo llamaban pasó de ser peyorativo hasta ser una alta distinción. Todo el tiempo buscaba ser uno más. Posiblemente hay tenido mucho carisma y una personalidad extravagante, que hacía que se pudiese relacionar con todas aquellas personas, conocidas o desconocidas con las que tenía trato.

Una de estas personas fue Juan Szychowski, le dedica todo un capítulo. Esta persona tiene un Museo con su nombre. El Museo Histórico "Juan Szychowski", en la Provincia de Misiones. Esta es su webpage http://www.yerbamanda.com.ar/museo.php donde dice textual “La Cachuera S.A., la más antigua de las empresas yerbateras de la provincia en actividad, fiel a su vocación y compromiso con la región, inauguró en el mes de Agosto de 1997 este Museo Histórico que lleva el nombre de su fundador, 'Juan Szychowski', el cual, el 17 de Febrero de 1999, por Resolución N 021/99 de la Secretaria de Turismo de la Provincia de Misiones, ha sido declarado Interés Turístico Provincial.
Todo fue realizado en el ámbito donde se desarrolló la vida y obra de este hombre, poseedor de una personalidad visionaria y laboriosa.
Allí, el visitante podrá sentirse transportado por la magia del tiempo, apreciando su obra en estado natural, cuidadosamente conservado en su aspecto histórico y ecológico.”

Entre sus descripciones, una me llamó la atención, más que nada para conocimiento general, de como en algunos lugares se les cambia el nombre a los animales o te los menciona de otra manera, por ejemplo al jaguar lo llaman tigre, al tapir lo llaman anta (págs.. 60/61, “el tapir, llamado en la selva el anta”), al dorado los lugareños lo llaman “el tiburón del Paraná”.
Me ha pasado de estar en una conversación y los lugareños del Norte argentino hablaban comúnmente del tigre y el león, y no los comprendía, claro, se referían al jaguar y al puma. Luego leyendo por mi cuenta, es común desde hace muchísimo tiempo que en toda América, más América del Norte, se refieran al puma como el león americano o simplemente el león.
Aquí en el relato, al igual en en la zona de los valles del norte argentino, al jaguar le llaman tigre, es una costumbre extendida, así como a los demás animales como lo menciona.

Realiza muchas descripciones, bastantes minuciosas, acerca de todo lo que vivió, desde las salidas de caza hasta los peligros y los contras de la vida difícil de la selva. No se guarda nada en sus descripciones de la naturaleza, los animales, cada uno de ellos de los cuantos en que se ocupa de hablar, la vida de los habitantes de la ribera, los pescadores, los cazadores, como atrapaban a su presas siempre para la supervivencia, de la pobreza y la vida simple y sencilla de los habitantes de las costas e islas, tanto de un margen como del otro, pensemos que habla tanto de Argentina como de Paraguay, de las reglas no escritas, de las técnicas, presenta explicaciones científicas y explicaciones vulgares para un mismo hecho al que hace referencia, grafica muy bien toda una época, mediados de la década del ´60.

Tema que menciona, tema que se explaya y profundiza, animales, vegetación, lenguajes, aborígenes, pobladores, inmigrantes, prefectura, buques, geografía. Todo lo desarrolla lo más que puede, presentando los temas como anécdota personal que vivió y condimentándolos con saber.
En la página 145 del libro, cuenta la siguiente situación “Hablando de “saltos” de las serpientes, mencionaré otro caso, aunque ahora me “avergüenza” recordarlo. Iba caminando por una senda por la selva cuando de repente me topé con un magnífico ejemplar de mamabera. Inquietada por mi presencia, levantó la cabeza como esperándome. Yo tenía una carabina, hice una macana, disparé. Tengo buena puntería, la distancia era apenas unos pasos. Apunté al cuello. Disparé y la serpiente desapareció como por arte de magia. Simplemente se desmaterializó. Yo estaba seguro de haber acertado. Sobre la senda encontré huellas de sangre. Pero ni rastro de la serpiente. Busqué, ayudándome con el caño de la carabina, entre el paso, nada. Me di por vencido. Al colgar la carabina en el hombro, levanté la cabeza: la serpiente estaba encima de mí, sobre una rama del árbol. La bajé con otro tiro. La primera bala le había atravesado el cuello justo debajo de la cabeza y sin embargo la serpiente había logrado huir, subir al árbol con la velocidad de un rayo de manera que cualquiera podría decir “salto a una rama”.
En una ocasión tuve oportunidad se ver algo similar, subiendo por un sendero, en un valle norteño, junto con un grupo de lugareños, mientras hacíamos un pequeño descanso, una serpiente surge de la maleza y se dirigía reptando hacía una de las personas que se encontraba sentada, otro muchacho del grupo, bueno de reflejos, levanta el machete que llevaba consigo y asesta el golpe a la serpiente antes que llegue a alcanzar al que estaba sentado, la parte por la mitad, y así como si nada una mitad “desaparece” y la otra mitad queda en el suelo. La emoción de todos allí nos impidió ver donde había ido la mitad con la cabeza, la mitad de la cola había quedado inmóvil. Buscamos y uno la encuentra a unos dos o tres metros de distancia, allá en un arbusto yacía colgada ya sin vida. Increíblemente había llegado reptando hasta dicho lugar después de haber sido cortada por la mitad.

La biodiversidad, más que nada los animales, están presente en todo el libro, cantidad de aves y peces, los peces hasta tiene una capítulo, animales domésticos o silvestres, peligroso o no, todos están comentados.
El cazador, sin perder tiempo, empezó a desollar el venado. Comprendí su prisa: simplemente que los perros merecían la recompensa. Por razones “pedagógicas”, de inmediato. (Pág. 52)

Casi la totalidad del libro se refiere a toda la zona de la Provincia de Misiones y parte de la Provincia de Corrientes, ya estando en Corrientes telegrafía a sus amigos en Buenos Aires, lo aclara y explica la diferencia entre las dos etapas, la etapa del vagabundeo y la etapa deportiva.

Encontré en la web el comentario de otros lectores de este autor y su libro
Uno de ellos, un mensaje en Facebook (Marzo 2013 o 2014), titulado
“HISTORIAS DESARMABLES X”
Kayaks desarmables que hicieron historia en Argentina, cuyo link es
https://el-gr.facebook.com/kaunokayak/posts/293379617479626
Del Facebook Kauno (Kayak Estructural Desarmable de Argentina)
https://es-es.facebook.com/kaunokayak
Y otro mensaje en un Foro de Campamentos (Abril, 2012)
http://campamento.foroactivo.com/t1229-la-vida-en-el-gran-rio
Y también, una web, posiblemente polaca, con una fotografía presumiblemente del libro en su versión polaca, al menos el título así lo muestra.
http://darien.pl/klub/?p=343



Vocabulario desconocido:

Mazurca.
f. Danza polaca en la que la mujer elige a su pareja.
Música de este baile.

Galocha.
(Del prov. galocha o del fr. galoche).
1. f. Calzado de madera con refuerzos de hierro, usado en algunas provincias para andar por la nieve, por el lodo o por suelo muy mojado.
(Cf. galota).
    1. f. desus. Birrete de dos puntas que cubre las orejas.

1. adj. Dicho de una persona: De mala vida.
2. adj. coloq. Dejado, desmazalado.

Palanquín.
(De palanca).
1. m. Ganapán o mozo de cordel que lleva cargas de una parte a otra.
2. m. Mar. Cada uno de los cabos que sirven para cargar los puños de las velas mayores, llevándolos a la cruz de sus vergas respectivas.
3. m. Mar. Aparejo que se usa a bordo para meter los cañones en batería, después de hecha la carga.

Caboclo.
Es el mestizo de blanco con indio. Otras antiguas designaciones del indígena brasileño eran caboco, mameluco, caiçara, cariboca, curiboca.

Jangada.
(Del port. jangada, y este de una voz dravídica de la India).
1. f. balsa (‖ plataforma flotante).
2. f. Salida o idea necia y fuera de tiempo, o ineficaz.
3. f. coloq. Trastada, mala acción hecha a alguien.

Otra acepción, que creo se adapta más al texto es :
Se denomina jangada a una balsa usada en Brasil y compuesta de cinco troncos de árbol, fuertemente reunidos.
Modelo de jangada. : Su popa es cuadrada y su proa angular, siendo el más saliente el tronco de en medio. Lleva un palo y una vela. Se emplea sobre todo en los ríos, aunque las hay de pesca que salen al mar y tienen cerca de cuarenta pies de largo.
De "Diccionario marítimo español" – José Lorenzo, 1865.

Jangaderos.
Quienes conducen la jangada.


Con respecto a estas dos últimas palabras, específicamente la Jangada, encontré en la web de Wikipedia algo que me pareció interesante y a continuación transcribo

La Jangada en la Literatura
Jules Verne escribió una novela llamada "La jangada", en la que un grupo de personas desciende por el río Amazonas en una embarcación de este tipo.
Horacio Quiroga habla del oficio de la jangada en sus cuentos "Una bofetada" y "Los mensú".
Con letra de Jaime Davalos y música de Eduardo Falu existe un tema popular del foclore argentino, "Cancion del Jangadero" en la que hace alusión a la vida de un jangadero, un hombre cuyo trabajo cotidiano es sobre una jangada.
http://es.wikipedia.org/wiki/Jangada

Un libro recomendable para leer, más que nada deportistas y aventureros de las aguas de río.

8 comentarios:

  1. Lo lei Todo 2 veces...!!! Atrapante historia para aquellos que amamos el Gran Rio..!!

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Gracias, son lindos este tipo de libros sobre el Paraná, a mí me gustan. Slds.

      Borrar
  2. Hola .. hice el tramo hasta cerca de Posadas .. desde Puerto Iguazú .. me gustaría mucho una copia de este libro .. tenés idea de donde pueda conseguirlo impreso o en PDF

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Hola. Que lindo que hayas tenido oportunidad de hacer ese tramo. No tengo conocimiento, por ahora, de que esté en pdf, ni siquiera figura con fragmentos google book. Supongo que en algún momento alguien lo compartirá. Slds.

      Borrar
    2. Está en la tienda online de Amanda!!! Londescubrí hace poco y compré tres pars regalar!!!

      Borrar
  3. Hola! leí éste libro cuando era muy chico, y ahora necesitaría conseguir alguna versión digital para un trabajo que esoty haciendo. Tienen conocimiento de cómo podría conseguirlo? Gracias!

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Hola. No tengo conocimiento que esté digitalizado ni sabría como conseguirlo. Slds.

      Borrar
    2. Comprálo en físico de la tienda de Amanda (la cschuera SA) y lo digitalizás con un escaner. Se lo podés pedir a una imprenta!

      Borrar