En esta nueva caminata, casi a las 12hs del mediodía, con apenas superando los 8km completé la distancia más larga hasta ahora.
Comencé a caminar en línea recta, y logrando el primer kilómetro, en el límite entre Palermo y Villa Crespo, había operarios trabajando.
Entré a Villa Crespo y continué caminado hasta llegar a la Av. Warnes. Allí giré a la izquierda y un par de calles más adelante encontré la Plazoleta Barón de Hirsch.
El espacio verde se compone de un pequeño triangulito de tierra, prolijamente cercado con una hilera de piedras y sobre ellas un corto enrejado. En su interior hay dos plantas entre pequeñas y medianas, pero la que destaca por su tamaño es una tercera, una palmera (Phoenix canariensis). Se trata de una planta exótica que también se la conoce como palma fénix o palma canaria, dado que es una especie de palmera endémica de las Islas Canarias, se encuentra protegida, y se la considera símbolo natural del archipiélago canario, conjuntamente con el canario. Debido a su belleza, facilidad de adaptación y resistencia al frío es una de las palmeras que más se usa en jardinería. En Ecuador, Chile, Argentina, Bolivia y Perú se utiliza como árbol ornamental principalmente en plazas y parques. (Wikipedia)
Caminé un par de cuadras más y llegué al Parque Centenario, apenas bordeé una calle que rodea a este parque, y antes de dejar atrás estás cuatro calles que marcan el límite del barrio Caballito, le tomé una foto a la Escuela 17 Presidente Uriburu, que en su puerta tenía dos micros escolares con su característico color naranja. Y es la foto que utilicé para fondo de datos de recorrido y mapa.
Luego emprendí el regreso por la frontera entre los barrios Villa Crespo y Almagro. Lo último que me llamó la atención, fue una pequeña plazoleta cercada por un enrejado y en su interior un calesita, que tenía unos pequeños decorados con molinos y árboles. Se trata de la plazoleta Elías Alippi, que hace algunos años recibió algunos cuestionamientos, primero por el enrejado y luego por la concesión de la calesita.
De allí directo a la meta. El día estaba lindo pero con un poco de viento, se podía ver mucho movimiento de nubes. Así concluye esta caminata.
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