En barrio
Palermo, precisamente en
Plaza Italia active la
app, y fue aquí donde comenzamos este recorrido. Derecho todo por ciclovía, pasando primero por el
Monumento de los Españoles y después por el
Monumento a Justo José de Urquiza. En no más de 10 minutos ya estábamos a la orilla de uno de los 4 lagos del
Parque Tres de Febrero, el
Lago del Planetario. Buscamos sentarnos en un sector entre el
Planetario Galileo Galilei y el
Lago, sobe el césped. Lugar había de sobra, al día lunes estaba bastante vacío, no obstante había gente desparramada por todo el parque. Enseguida nos sentamos, llegaron visitantes. Habitantes del lugar. Aves. Un surtido de
tordos renegridos,
tordos músicos,
palomas domésticas y
patos criollos se acercaron a buscar su comida. Y así se fue una hora. Algunas fotos por aquí, otras fotos por allá, y llegó el momento de meter pedal. Una vuelta que iba a implicar el paso por 7 barrios porteños. No hace falta aclarar, o tal vez y por eso lo escribo, que cuando uno realiza determinada actividad, la
app corre, registra, pero cuando uno se para (por la razón que fuere), la
app se detiene también, por eso se denominan
aplicaciones inteligentes, porque tiene una
inteligencia artificial que comprende esa rutina, lo cual no significa que sean 100% precisas, tienen errores como todo sistema creado por el humano. A la hora de partir, volvimos a pasar por los dos monumentos antes mencionados y esta vez giramos hacia la izquierda por la ciclovía que corre paralela a la
Av. Libertador.
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Monumento de los Españoles. |
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Monumento a Justo José de Urquiza. |
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Lago del Planetario y Planetario Galileo Galilei.
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Patos criollos. (Cairina moschata).
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Patos criollos y Paloma doméstica.
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Lago del Planetario.
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Tordo músico. (Agelaioides badius). |
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Tordos renegridos, Tordos músicos y Palomas domésticas. |
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Tordos renegridos, Tordos músicos y Palomas domésticas. |
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Patos criollos. (Cairina moschata). |
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Pato criollo. (Cairina moschata). |
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Patos criollos. (Cairina moschata). |
Tomamos la ciclovía que corre paralela a la
Av. Libertador. Había mucha gente en todo ese sector de los parques. Muchos deportistas y personas que salen a ejercitar en diferentes modalidades. A partir de las 17hs es cuando aumenta el caudal de gente los días de semana. Por esta ciclovía hicimos unas aproximadas 20 cuadras. Al cruzar calle
Tagle (por donde está
Canal 7 ATC ahora
TV Pública) entramos al barrio
Recoleta. Al llegar al nacimiento de la
Av. Pueyrredón hicimos una curva y tomamos por la
Av. Alvear. Por
Av. Alvear no hay ciclovía. Cuatro cuadras más adelante giramos por calle
Montevideo, y desde aquí unas 15 o 16 cuadras hacia adelante. En esta calle si hay una ciclovía. Por dos cuadras circulamos entre el límite de los barrios
Recoleta y
Retiro. Pasamos por la
Plaza Vicente López y Planes, pero sin detenernos, la calle en este lugar presenta una ligera curvatura, figurativamente hablando, de unos 120º. Al cruzar la
Av. Córdoba entramos al barrio
San Nicolás. Aquí avanzamos unas 6 calles. En este lugar me separé del grupo. Tomé la cámara y la conecté. Caía la tarde. El sol de escondía. Tomé rumbo “hacia arriba”, girando hacia la derecha por la ciclovía de calle
Perón. En realidad, el trayecto que va desde calle
Montevideo hasta calle
Paso no es una ciclovía, es apenas una bicisenda, solo marcada con dos líneas blancas. Hay que ir con sumo cuidado por este lugar, en lo posible hay que evitarlo en horarios pico porque es un desastre por el agrupamiento de tránsito vehicular motorizado (por varios factores, zona cercana a microcentro, muchos taxis, zona de negocios, muchos transporte de carga y descarga, muchos vehículos particulares, etc…). Ese sector es caótico. Hay solo una cuadra que va desde calle
Paso, que la bicisenda está delimitada con un cordón, también hay que ir con cuidado porque no es doble vía, sino una simple senda. Y la última cuadra antes de llegar a
Av. Pueyrredón, hay ciclovía pero justo ahí es donde se instalan los manteros, que se ocupan la mitad de la ciclovía, y la otra mitad está muy caminada por transeúntes y carreros, todo ello hace que sea bastante intransitable.
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Museo Nacional de Bellas Artes. |
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Plaza Vicente López y Planes. |
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Hermanas Esclavas del Sagrado Corazón. |
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Ciclovía calle Montevideo. |
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Bicisenda calle Perón. |
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Estación Once de Septiembre. |
Al cruzar la
Av. Callao había entrado al barrio
Balvanera. 16 cuadras más adelante estaba saliendo de dicho barrio, justo en la calle
Gallo, donde termina el
Parque de la Estación. Allí ingresé al barrio
Almagro. En barrio
Almagro se hacen cuatro cuadras por calle
Perón, se sube una por calle
Bulnes y se retoma la ciclovía por calle
Potosí. 8 o 9 cuadras más adelante entré al barrio de
Caballito, inmediatamente al cruzar la calle
Río de Janeiro.
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Ciclovía llegando al Parque de la Estación. |
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Parque de la Estación. |
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Pinturas en una vidriera de un taller de marcos.
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En el barrio
Caballito, esta ciclovía desemboca directo en el
Parque Centenario, y así como venía hice dos cuadras del círculo hasta el
Mástil. Allí tomé algunas fotos, me hidraté, y al ver que el
Parque Centenario estaba con bastante gente de aquella que sale a ejercitar, corredores, caminantes y paseantes de perros, decidí regresar por donde venía, por el mismo camino, para retomar la ciclovía. Tuve una idea que me pareció buena, salirme de la ciclovía para pedalear por una calle aledaña con la finalidad de acelerar el paso, parecía muy buena, y así fue durante unas cuatro cuadras hasta llegar al cruce de la
Av. Ángel Gallardo. Allí había un nutrido tránsito, y me preguntaba ¿para qué me salí de la ciclovía?. Al cruzar la
Av. Ángel Gallardo entré al barrio
Villa Crespo. Dos calles más y al fin llegué a calle
Julian Álvarez para volver a tomar una ciclovía, giré a la derecha primero, y luego a la izquierda por ciclovía de calle
Ignacio de Loyola unas cuatro calles hasta calle
Serrano, y nuevamente a la derecha hasta
Av. Córdoba.
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Mástil del Parque Centenario. |
En este punto del cruce de calle
Serrano con
Av. Córdoba se produce el fin del barrio
Villa Crespo y el ingreso, o re-ingreso en mi caso, al barrio
Palermo.
Mientras estaba esperando para cruzar, con el semáforo en rojo, me percato que la ciclista que iba delante de mí llevaba casco, lo llevaba colgado a un lado de la cintura. De no creer, puedo entender que hay ciclistas que no llevan casco (por la razón que fuere) y no los justifico, pero hay un grupo menor de ciclistas que teniendo disponible el casco, lo llevan en sus salidas pero no en la cabeza sino en cualquier otro lado, en la mochila, en el canasto, o como este caso, colgado a un lado de la cintura. Me resulta realmente incomprensible y me ahorro más comentarios. La ciclista llevaba hecho una suerte de rodete en su cabello y por supuesto, colocarse el casco podría resultar incómodo. Mientras estaba allí esperando y tomando foto, casi sucede un hecho más incomprensible aún. El ciclista de al lado, directamente sin casco, y ambos parados en lugar que no corresponde, teniendo semáforo en rojo, decide arrancar pedaleando con suerte de quedar cruzado justo delante de un ciclista que venía por la ciclovía de mano única que corre por
Av. Córdoba, que por poco no se produce el choque sino es que rápido de reflejos el ciclista que (también sin casco) cruzaba correctamente logra esquivar al que se le cruzó. Lamentablemente hay mucha falta de educación vial para todos en la ciudad, en este caso, ciclistas.
7 cuadras más adelante finalizaba el recorrido, justo en la
Plaza Cortázar.
Aquí algunas capturas del video donde filmé parte del recorrido, desde cruce de calles
Montevideo y
Perón hasta calle
Ramos Mejía.
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Una constante: postes plásticos flexibles rotos o faltantes.
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Obstáculos en la bicisenda – frazada. |
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Obstáculos en la bicisenda – bolsa de basura. |
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Peatón cruza mal y sin mirar, se da cuenta y vuelve hacia atrás. |
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Manteros ocupando la ciclovía. |
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Manteros ocupando la ciclovía. |
El tema de los manteros es de nunca acabar. Si los sacan y les retienen la mercadería, acusan que los persiguen. Es verdad que son gente pobre y no es agradable vivir en la calle, también es verdad que necesitan “trabajar”, pero no es menos cierto que venden de manera ilegal y “en negro”. Hay todo un negocio detrás del ese tipo de venta que no es la venta ambulante. A veces es difícil determinar y separar los que genuinamente comprar el material que revenden en tiendas mayoristas de los que lo adquieren a grupos organizados específicamente para los manteros. Estos se instalan con sus mantas y llevan cajones, tachos o directamente sillas. Ahora se ocupan media ciclovía
cagándose perjudicando a los ciclistas sin importarles nada. ¿Cuál es la solución? Sacarlos, pero la realidad que no se los puede sacar porque vuelven y se genera violencia además no se los reubica o se los reubica de manera no estudiada y torpe. ¿Existen otras soluciones? Una podría ser levantar una pared de un metros (más o menos) en la vereda, justo al lado del cordón, pero tampoco serviría de mucho, sería algo momentáneo y hasta peligroso para con los peatones, sumado a que la podrían romper. Tal vez canteros con plantas. Otra solución alternativa podrían hacer ciclovías por otras calles adyacentes, una o dos ciclovías en ese sector tan concurrido de
Once, evitando precisamente esa calle de las más transitadas.
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Bache.
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Parecía el lugar de una tapa de desagüe de las redondas metálicas, pero no, se trataba de un bache, un super bache que hay que evitar para no caer, ubicado justo donde se gira.
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Monopatín encandilado. |