Cuento del libro: A merced del viento. Autora: Patricia Highsmith.
Otro cuento que no me llamó mucho. Quizás no sea de mi gusto o tal vez no supe ver bien su contenido, que lo tiene como todos los cuentos. De este cuento ni siquiera tomé notas puntuales. Pareció bastante simple, no porque no este elaborado, sino que más como un relato de algo cotidiano y si uno no está muy atento, pueden caerse las expectativas rápidamente. El lenguaje que utiliza para describir la vida diaria de los personajes es muy correcto, y quizás sea el propio de aquellas latitudes. No obstante, el cuento tiene un meta-mensaje.
En tiempos que no existía internet ni muchos menos las redes sociales virtuales, existía le teléfono, y es así que se conformó “la red” “La Red consistía en un grupo de amigos de Nueva York que se levantaban la moral telefónicamente los unos con los otros, dando constantes demostraciones de amistad y de solidaridad contra el océano de enemigos, rivales, potenciales ladrones, violadores y estafadores”. (Pág. 21)
Por partes parece como poco cuidado, o hecho a las apuradas. Pensemos en ese primer fragmento, plantea cuatro clases asertivas de, por decirlo de alguna manera, personas que hacen el mal, o personas negativas, enemigos, rivales, violadores y estafadores. Un rival, puede no ser un delincuente, quizás sea negativo para el personaje y quiera evitarlo, pero si se conduce dentro de los cauces de la ley, el rival no es un delincuente ni mucho menos un peligro. Hay que ver, la consideración de rival, en el habla americana, y si difiere de como lo vemos nosotros. Pero luego, deja de lado la aseveración, y pasa a la duda con potenciales ladrones. Es contradictorio, se sabe que hay estafadores y violadores, pero no puede aseverar que haya ladrones, cuando lo que transmiten las estadísticas en materia criminal y en todos los últimos cien años en grandes urbes, es la mayor cantidad de ladrones frente estafadores y violadores. Podría haber puesto en potencial todos, de hecho hasta ese momento no se da cuenta de ningún delito acaecido. O bien, podría haber aseverado la existencia de todos esos tipos de delincuentes. Otro punto, que al decir, potenciales ladrones, puede dar lugar a la criminalización del delincuente a partir de un estereotipo, como volveré sobre el tema, más adelante.
El personaje principal es Fran. Una mujer que es la encargada de la Red. La encargada “extraoficial”, y me pregunto ¿quién sería la oficial?. Llega un punto que la actividad en la Red la tiene tan compenetrada que llama dos veces por día a los integrantes para ver si se encuentran bien. No puedo evitar el paralelismo con la actualidad y la cantidad de personas dependientes del teléfono portátil y las redes sociales. Quizás en esto radica el punto central del cuento. Y la autora lo manifiesta con mucha sutileza. La soledad en una jungla de gente. Hablamos de Nueva York, una ciudad muy poblada. La necesidad del trato social, pero con relaciones, en ocasiones, superficiales y absorbentes. Otra característica proviene de uno de sus apodos, la ciudad que nunca duerme. Aquí tenemos el miedo. El miedo al entorno, el conocimiento de hechos delictivos, el temor a sufrir la violencia de la delincuencia y al mismo tiempo, la alegría y el acompañamiento de estas amistades que se forman en torno a la Red. En cierta medida, el miedo común a todos ellos, los une frente al peligro, a los peligros que acechan en la ciudad.
Un punto algo chocante, es la cuota de racismo, o desprecio por ciertas minorías. Que visto desde la mirada actual, y desde la realidad es claramente incorrecto. Si lo miramos desde el punto de vista literario, es correcto, una creación. El tema que aquí pareciera que estigmatiza, por ejemplos, al decir genéricamente que los hechos de violencia que se suceden en la historia, mayormente son producto de negros y latinos.
Y aunque se consideraba una liberal, y en sus años escolares se había llevado bien con los estudiantes negros,[1] en años posteriores se convenció de que los negros eran responsables de la crisis del bienestar en Estados Unidos.[2] No le gustaban los coreanos porque "comían perros".[3] Según la guionista de Carol Phyllis Nagy, "a menudo se tambaleaba en el antisemitismo absoluto".[4]
Si se puede superar este descarado racismo, se puede leer, incluso se puede analizar un poco más. Hay que tener en cuenta que la criminalización de negros y latinos. "El instrumento que se utilizó para re-criminalizar a la población negra fueron las drogas. En lo que ha sido exitosa la guerra contra las drogas es en criminalizar a los pobres. Y los pobres en EE.UU. resultan ser en su mayoría negros y latinos"[5] señala un analista estadounidense. Habría que considerar las tasas de delincuencia de esa criminalización y ver si existía un correlato, como para tratar de comprender el texto de Highsmith, sin dejar de lado que es un texto literario, pero al mismo tiempo tiene características de ser realista. Otra crítica dice lo siguiente “The Network, sobre el sistema de apoyo más bien infantil dentro de un grupo de amigos de la ciudad de Nueva York, está repleto de notas falsas.”[6] Quien sabe ¿a qué se refiere con notas falsas?, es un texto con características realistas, pero eso no significa que haya descripto la realidad puntual de Nueva York.
Llega un punto que la Red se vuelve sobre-protectora, por el tiempo que dedica Fran a ocuparse de sus compañeros con el pretexto de hacer el bien. A su alrededor giran los miedos de su entorno. Uno de ellos es Greg, que se siente abrumado y decide salirse, buscando cierta independecia (¿es posible?). Esa misma noche es atacado y sucumbe a los delincuentes. Quizás en este hecho es cuando se marca la brecha profunda entre ricos y pobres. Pero, ¿equipara a los pobres con los delincuentes? ¿son los pobres los que delinquen? ¿son ellos, los ricos, los que pueden organizarse en una Red? ¿o ellos son los pobres desprotegidos y por eso necesitan organizarse en una Red para no ser víctimas de la delincuencia? De alguna manera esta Red, se conecta o se aisla, depende como se lo mire, con el entorno urbano, que aparece extraño, repulsivo, y en parte, peligroso.
Tal vez sea necesaria la re-lectura al cuento. En cierto momento pareciera indicar los beneficios sociales de pertenecer a un grupo dentro de una sistema mayor (la ciudad), por ejemplo, el hecho de conseguir una trabajo a partir de los contactos informales dentro del grupo o el hecho de faltar al trabajo con prescripción médica (que quizás no era necesaria). Así lo dice en un fragmento “Utiliza al sistema, estaba pensando Fran. No trates de resistirte, haz que trabaje para ti”. (pág. 42)
Citas.
[1] Attallah, Naim (27 de mayo de 2010). "Ya no está con nosotros: Patricia Highsmith" . Naim Attallah en línea . Consultado el 9 de junio de 2017.
[2] Wilson, Andrew (2003). "La búsqueda eterna". Beautiful Shadow: A Life of Patricia Highsmith (1ª ed.). Bloomsbury . ISBN 1582341982.
[3] Hodgson, Godfrey (6 de febrero de 1995). "Obituario: Patricia Highsmith" . The Independent . Consultado el 16 de marzo de 2017 .
[4] Nagy, Phyllis (29 de noviembre de 2015). "Scotch, cerveza y cigarrillos: mi fin de semana con Patricia Highsmith" . The Guardian . Consultado el 28 de marzo de 2017.
[5] Noam Chomsky (analista político estadounidense) en https://actualidad.rt.com/actualidad/view/116580-chomsky-drogas-negros-eeuu-criminalizar 10 ene 2014. Visitado el 10/01/2018
[6] https://www.kirkusreviews.com/book-reviews/patricia-highsmith/slowly-slowly-in-the-wind/
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